Alejandro Quincoces
Las cosas de la carne y vistas de ciudades.
El artista Alejandro Quincoces regresa a nuestra galería, cinco años después, para presentar su obra más reciente. Pinturas de gran y mediano formato que incluyen, junto a sus reconocidas vistas urbanas, las primeras piezas de una temática no abordada hasta ahora por el pintor, recogidas bajo el título «Las cosas de la carne».
«Es importante para mí la expresión de situaciones y el color desempeña un papel fundamental, el casi no color busca intentar el razonamiento del espectador más que la emotividad, lo blanco y negro ocupa al pensamiento en un deseo de hacernos ver lo que pasa más allá del cuadro, el paisaje no solo es algo más o menos bello, es el escenario donde pasan la vida y sus hombres y la consecuencia de ellos.
Me interesa la expresión de la mano, el gesto, los recursos técnicos y el razonamiento ante situaciones-reflejo de nuestro entorno diario, una relación a tres partes, visto, pintado, razonado.»
Notas de prensa:
«Las ciudades de Quincoces son incursiones fantasmales en la metrópoli moderna, con sus avenidas, semáforos, sus aceras, sus coches y su contaminación. Son también minuciosos estudios de perspectivas que recorren la fisonomía urbana, analizadas a ras de suelo, en altura o en profundidad.
Todo parece haberse detenido en las imágenes de Quincoces, y, sin embargo, seguimos escuchando a lo lejos el murmullo de ese ajetreo permanente, anónimo, de la gran ciudad».
El Punto de las Artes, 15 de abril de 2002, Amalia García Rubí
«En esta ocasión Quincoces presenta pinturas relacionadas con ciudades tan distintas como Londres, Nueva York y Bilbao. Las imágenes, sin embargo, están trabajadas con el mismo interés de búsqueda de una realidad muy rica en tonos y matices.
De este modo representa imágenes de Bilbao, desde el Puente de Euskalduna, las márgenes de la Ría, o bien las calles repletas de tráfico de Nueva York o las autopistas y vías de velocidad rápida.
Conjugando el grafito con el color, Alejandro Quincoces consigue aunar intenciones para expresarse con sinceridad y representar los lugares que el mismo recorre todos los días».
El Correo, 17 de abril de 2002, Alicia Fernández.
«La obra de Quincoces es culta, aunque amarga. La inspiración le viene de la digestión y abandono, o de la superación del expresionismo y del cubismo abstracto y el constructivismo.
El realismo urbano que practica Quincoces emplea el potencial expresivo del paisaje, y busca allí una forma de comunicación entre razón y visión. La liberación de la razón le ayuda a profundizar en un mundo de sentimientos, imágenes concebidas como algo utópico pero deseado, que está por encima de la propia realidad.
En definitiva, la mirada de Quincoces contempla el universo desde una interpretación contemporánea muy propia: su utopía deseada».
El Mundo, 1 de mayo de 2002, Javier Urquijo.
Fecha: 03 Mar - 01 Abr 2022
