Marcelo Fuentes
Bilbao, una mirada
Los óleos, acuarelas y dibujos que componen esta exposición son el fruto de un viaje realizado un año antes. Acompañé entonces a Marcelo Fuentes a Bilbao, una ciudad que él desconocía, y ahora, con la memoria todavía fresca de aquellos días, acompaño de nuevo con mis palabras a las pinturas que el tiempo, fuerza reveladora de conexiones ocultas, paciente fluido germinador, ha destilado a través de sus pinceles. Al principio Marcelo tenía impresiones sonoras, casi musicales, nostálgicas. Ambos imaginábamos una ciudad de acero vibrante incrustada en una nube, una metalurgia paradójica y neblinosa. Sin embargo, aquellos días brilló el sol y ni una gota de lluvia sació la sed de nuestra expectación. Nos cansamos de andar buscando lo que ya llevábamos en la cabeza, y sólo nos encontramos con la sorpresa de una realidad luminosa y diferente. […]
La pintura de Marcelo Fuentes anuda con naturalidad dos imitaciones, dos huellas que el tiempo fragua en la memoria: por una parte, la vaga pero esencial alusión a la apariencia visible de las cosas, el testimonio de una una impresión sensible interiorizada y devuelta al exterior por la materia pictórica, transfigurada por el oficio, esa alquimia capaz de cuajar en formas visibles hondas emociones. Por otra parte, pero indisolublemente, la huella autoreflexiva del propio proceso, el relato que el cuadro contiene acerca de su propio crecimiento, la sucesión de un hacer que condensa capas, estratos de tiempo, memoria rítmica, y que por tanto no imita la apariencia epidérmica de la naturaleza y de las cosas sino sus procesos internos, el modo en que la vida inmóvil y el paso del tiempo late casi imperceptiblemente en ellas. Es por eso que la pintura de Marcelo Fuentes nos interpela invitándonos a reconocer en nosotros mismos aquello que sensualmente persiste y vive por debajo de nuestro cíclico girar en por de no sabemos qué, ni hasta cuándo, ni mucho menos para qué.
José Saborit. «A roillas de otro tiempo.» (Fragmento. Texto del catálogo de la exposición.)
Notas de prensa:
«Una exposición que nos ofrece otra dimensión sobre el paisaje urbano, diferente, menos artificial o aparente si se quiere, y más profunda en su expresionismo.
Las imágenes en óleo sobre lienzo, las acuarelas y dibujos que componen esta muestra son a menudo recuerdo de aquellas viejas fábricas hoy erguidas en edificios simbólicos, memoria de su decadencia y belleza inusual de aquel paisaje donde mar, cielo y arquitectura transfiguran los estratos del pasado en vestigios redescubiertos, en sinfonías intemporales escritas a golpe de fragmento y compás geométrico.
Marcelo Fuentes ha entrado en la ciudad, habitándola desde su enigmática visión de pintor. De sus múltiples sensaciones y meditaciones han surgido estas obras anónimas, paisajes primordiales de arquitecturas para el reposo».
El Punto de las Artes, 26 de marzo de 2003, Amalia García Rubí.
Fecha: 25 Feb - 22 Mar 2003