Estares

Todo va deprisa. Resulta difícil detenerse. Marcar un tempo más sosegado. Desde mi última exposición en Bilbao han pasado dos años y casi no me he dado cuenta. En ese tiempo he realizado varias exposiciones individuales, he concluido el Camino de Santiago pintando (un proyecto al que ya le he dedicado muchísimo tiempo y que todavía estoy pendiente de culminar con la publicación de un libro en el que estoy trabajando), y finalmente ultimo los detalles para la presente exposición. Demasiado.

Sin embargo, en ese maremágnum de cosas mi trabajo se ha ido sosegando. Me voy haciendo más escéptico y me preocupo de cosas más pequeñas y menos de arreglar mundos.

En esas estaba. En el estudio. Sentado. Tratando de ordenar unas líneas sobre el papel. Al levantar la vista los cuadros se mostraban dispersos por el estudio. En desorden. Unos aquí, otros allá, otros en el suelo queriendo formar grupos racionales… […]

Antón Hurtado. «Estares» (Fragmento).

Texto incluido en el catálogo de la exposición:

– Sigues en el “sosiego” de tus refugios. Las formas son como más realistas, aunque no se reconozca ningún lugar o se sepa qué representan.

– Bueno, es cierto. Las formas son las mismas, ahora los empastes son más transparentes y se ve cómo está depositada la pintura sobre el soporte. Se ve cómo ha ido construyéndose el cuadro. Parto de lugares y cosas concretas, en ocasiones utilizo fotos de lugares que me interesan, más por las formas que contienen que por el lugar que representan, algo que pasa a ser secundario. No sé de qué modo ha podido influir el tiempo en el que he estado trabajando del natural a lo largo del Camino de Santiago.

– Voy a enseñarte las acuarelas que hice. El tema central son los cruceros y rollos que hay a lo largo de su recorrido. Como ves, vuelvo a los elementos verticales que de forma habitual aparecen en mi trabajo: chimeneas, árboles o insinuaciones de la figura humana. Además, los cruceros me han interesado como elementos arquitectónicos que hablan de la sociedad y de los lugares en los que están ubicados y por los que siempre mostré curiosidad. De niño me impresionaban.

– Las acuarelas describen un camino naturalista en el que saco a relucir las cosas en las que se fija cualquiera de las miles de personas que lo recorren.

– Puede que sea así, aunque por la paleta de colores con los que trabajas se nota una contención que las acerca a tu trabajo en el estudio del que tengo la sensación de que estás pasando por un momento de descreimiento y es menos sensual. Se ve más duro. Los cactus o esas islas en un mar movido…, los edificios que recuerdan a Irak…, una ballena emergente que, aunque recuerda a anteriores formas cónicas, no tienen la serenidad anterior.

– Bueno. Este paraíso en el que estamos es un lugar duro. No es tal paraíso. Es imposible mantenerse siempre en silencio.

Notas de prensa:

«Antón Hurtado, dialoga en sus creaciones pictóricas y escultóricas con el paisaje hasta equilibrar con inteligencia un geometrismo sensible y una sutil imaginación, pues en su trabajo la rigidez de los elementos formales se halla sometida a la calidez poética y a la evocación plástica, siempre a partir de un brillante ahorro de elementos expresivos. 

Podríamos decir, en definitiva, que Antón Hurtado con lo mínimo llegaba a desarrollar lo máximo, lo que siempre tiene como resultado una obra depurada, sin elementos superfluos, de un exquisito rigor que solo confía en el azar vigilante y donde cada trazo es una sentencia bien construida». 

El Punto de las Artes, febrero de 2004.

«Antón Hurtado presenta en la Galería Juan Manuel Lumbreras, la muestra se divide en dos partes bien diferenciadas. La primera de ellas está compuesta por una serie de cuadros de pequeño formato en los que trabaja las líneas características de su trabajo. La segunda parte de la muestra la componen una serie de acuarelas de paisajes que el artista se ha encontrado al realizar el Camino de Santiago». 

Periódico Bilbao, febrero de 2004, Galder Reguera.

Fecha: 10 Feb - 06 Mar 2004